Después de usar el SaeboGlove, sentí que mi mano se fortalecía, mejoraba su coordinación y su flexibilidad. Ahora estoy volviendo a poder hacer las cosas que antes me encantaban, como tocar la guitarra.

Hace cuatro años, mi hija celebró su primer cumpleaños en un hospital de rehabilitación donde me recuperaba de un derrame cerebral isquémico que me dejó paralizada del lado derecho del cuerpo. El derrame fue una experiencia horrible que surgió de repente. Después, no podía caminar, comer ni siquiera ver con el ojo derecho. Antes del derrame, era mecánico de aviones y disfrutaba tocando la guitarra, haciendo paddleboard, surfeando, volando y, en general, divirtiéndome al aire libre y con mi familia en nuestro pequeño pueblo pesquero de Alaska. Después del derrame, me costaba hacer las cosas más básicas.

Inmediatamente después del derrame cerebral, me recuperé en el hospital durante dos meses y trabajé para poder caminar y comer de nuevo. Afortunadamente, pude recuperar estas funciones, pero cuatro años después sigo en terapia, trabajando para recuperar la función de mi brazo y mano. Antes de que mi terapeuta ocupacional me diera el Guante Saebo , mi brazo estaba demasiado débil para abrir la puerta del refrigerador o coger algo de un estante. Estas cosas eran difíciles en parte porque tenía que concentrarme demasiado en mi mano. Ciertamente no podía hacer paddleboard ni tocar la guitarra porque no podía controlar mi agarre. Una vez que el remo estaba en mi mano derecha, no podía soltarlo para poder usar la otra.
Después de que comencé a usar el Guante Saebo noté mejoras notables. Usé el Guante Saebo en casa para practicar cosas, como sacar algo de un estante o artículos de un tazón. Luego, al día siguiente, incluso cuando ya no lo estaba usando, sentí que mi mano se fortalecía, mejoraba, mejoraba la coordinación y la flexibilidad. Ahora, estoy empezando a poder hacer las cosas que una vez amaba de nuevo, como tocar la guitarra. Antes de usar el Guante Saebo , no podía sostener la púa de la guitarra, pero ahora sí. A mis hijos les parece genial el guante; mi hija me ayuda a ponerme las ligas. ¡Es como una mano de Iron Man! El Guante Saebo es un producto fantástico. Estoy agradecido de poder usarlo y animo a otras personas que se recuperan de un derrame cerebral a que lo prueben. Ha marcado una verdadera diferencia en la calidad de mi vida.